Nada mejor que disfrutar de un rico pollito frito de KFC y un refresco, sin embargo, ¿qué pasa cuando llega con sorpresa?
Esto le pasó a un usuario que se llevó una gran sorpresa al encontrarse una cabeza de pollo empanizada.
Conoce las cosas más extrañas encontradas por usuarios en sus pedidos a domicilio, que nos hacen pensar en la confiabilidad de lo que comemos.
¿Solo en KFC?
Kentucky Fried Chicken es una cadena de restaurantes de comida rápida de pollo frito con más de 22 mil locales en 150 países. Se caracterizan por su peculiar forma de promocionarse como el descuento que hacían si pedías tu orden rapeando.
No está confirmado que la cabeza de pollo encontrada por este usuario provenga de un pedido hecho en KFC, sin embargo, podría tratarse de una cadena de restaurantes similar.
Algunos usuarios que trabajaron en dicha cadena de comida rápida, aseguran que sería imposible que sucediera tal cosa. Los mismos aseguran que el pollo se revisa a diario antes de marinar, mismo que es distribuido por Bachoco.
Trabaje en kfc en mi adolescencia el distribuidor de pollo es bachoco, llega a diario, se revisa y después se marina, jamas jamás, entre las piezas de pollo envían la cabeza
— Ander Gara (@ZionAnder) January 19, 2023
Algunos otros aseguran que sería imposible que sucediera algo así, debido a lo cuidadosos que son hasta en el tipo de corte especial que deben llevar.
Locales en Toluca
Usaría en redes se llevó tremenda sorpresa en su pedido a domicilio:
«Un día pedimos a domicilio, en el puré de papa nos salió una basurita blanca (un papel dobladito)… Era el protector de pegamento de una toalla sanitaria… Esto en Toluca»
Aquí no se desperdicia nada 😌👌🏻 pic.twitter.com/ghWRYdtzpD
— @LuisValLe (@LuisValLe_A) January 18, 2023
Cosas extrañas encontradas en comida
Aunque, esto ha desatado comentarios en redes de muchos usuarios que han contado sus experiencias con pedidos que han hecho a KFC.
Estas van desde cosas simples como el cambio de piezas del combo:
«Fui por un combo y me dieron alas y huacales, en lugar de muslos y piernas, fui a comprar, no a que me regalaran retazos.»
Aunque al parecer es algo común cuando constantemente existen trabajadores nuevos que se ponen nerviosos al hacer los pedidos.
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